LOS GOBIERNOS VASCO, ESPAÑOL Y EUROPEOS NO ESTÁN EN TREGUA: INFORMACIÓN Y AGITACIÓN, TAMPOCO. CONTRA LOS RECORTES NO TE CORTES, KAÑA!!



23.7.12

‘RIAU RIAU’, ESPONTANEIDAD Y ENCIERRO DE LA VILLAVESA : ¡¡EL REGRESO DE JAVIER OTXOA!!




Tras correr ríos de tinto –y derivados- entre el 6 y el 14 de julio, verdaderos mares de tinta lo están haciendo desde el 15 con motivo de cierta resaca sanferminera: enrarecido estado de malestar generado, entre otros, por hechos tan desafortunados como el intento “fallido” (según la prensa oficial) de recuperar el “Riau Riau” o la represión desatada contra los corredores del tradicional encierro de lavillavesa. Dejando de lado lo acontecido en la denominada “marcha a vísperas”; lo sucedido en, como mucho, el folclórico sucedáneo de “Riau Riau” interesadamente anunciado en el Programa, reflexionemos sobre lo ocurrido en el demonizado encierro de la villavesa: acto de raigambre popular, de carácter totalmente espontáneo (seña de identidad por excelencia en otros tiempos de la alegría sanferminera, la naturalidad o espontaneidad de los mozos en la fiesta) e inofensivo e imaginativo -a todas luces- pero, al parecer, ofensivo actualmente para algunos. 


Para los de siempre, la rancia casta política que nos gobierna. La amargada casta política local, la cuál, en su paranoia por tener todo bajo control, no puede permitir que nada escape a su supervisión, llegando al extremo de castigar con excepcional dureza algo que no es sino una parodia. Nada más. ¿Excepcional dureza, decíamos? Bueno, con la dureza habitual por estos lares, consiguiendo los uniformados en esta ocasión la increíble hazaña de mandar a sus casas morados por fuera a quienes ya lo iban por dentro. Y, fruto de las embestidas padecidas, incluso negro-amoratados, por ir “morados” fuera de hora; y todo ello por el delito de intentar alargar por unas horas la fiesta. En fin. Y es que, en lo referido a “espontaneidad”, parece que aquí sólo pueden ser así, “espontáneas”, ciertas manifestaciones. O el pasillo de jóvenes pamploneses surgido “espontáneamente” el día 6 para tratar de salvar el “Riau Riau”: marcha a vísperas que por cierto, en los tiempos actuales, habida cuenta de su naturaleza crítica con el poder, no hubiese tenido oportunidad ni de nacer. Tal vez a la entrada de la calle Mayor hubiese sido disuelta a pelotazos.



EL "FALLIDO" INTENTO DE RIAU RIAU SERVILMENTE RETRANSMITIDO POR NAVARRA TELEVISIÓN, NUESTRA "CADENA AMIGA" POR EXCELENCIA


20.7.12

YA SOC AQUÍ!!

Bueno, tras unos meses de exilio, tras comprobar cómo están las cosas por el mundo exterior, no habiendo logrado hacer carrera, ya soc aquí, que diría el honorable Tarradellas. Así pues, espoleados como nunca por los tiempos que corren, poco a poco iremos dándole vida nuevamente a este blog. Próximamente nuevas entradas a vuestra disposición!!

5.7.12

SANFERMINES 2011, ODISEA EN EL CIBERESPACIO: YA, LAS MEJORES JUGADAS


Bueno, como lo prometido y anunciado es deuda (pública o no, tal y como se dice ahora a todas horas), nos llena de orgullo y satisfacción comunicarles que ya estamos prácticamente preparados para la que se avecina:  tal y como hicimos en 2010, retratar los sanfermines a nuestra manera. Desde la falta de vergüenza, perspectiva y de criterio más absoluta.  Esperando que no salga ninguno de ustedes protagonizando nuestras ocurrencias (circunstancia de la que, en caso de suceder, trataremos de salir airosos gritando el apolítico Sanfermín, Sanfermín) que ustedes disfruten de las mismas. Bienbebidos a la fiesta!!



2010, Sanfermines en blanco y negro en medio del rojo gualdo imperante, gracias al triunfo en la Eurocopa del combinado nacional o selección estatal. Esperemos que, con el kalimotxo como único combinado reconocido como local, nacional, estatal o peninsular, la presente edición del botellón sanferminero discurra por el blanqui-rojo habitual.



BICOLOR BANDERA DE PAÑUELICOS ARDIENDO AL VIENTO, TODO UN MÁGICO ESPECTÁCULO DE SENSACIONES Y COLOR; ¿LA PRUEBA DE QUE LA ESCENA ESTÁ RECOGIDA EN RAMPLONA? ¡LA PRESENCIA DE LA MONJA, CÓMO NO!


IKURRIÑA Y PLAZA DEL AYUNTAMIENTO: TENEMOS LA SOLUCIÓN

Un año más, erre que erre, estaremos el día 6 de bronca a costa de las banderitas; ¿de la ikurriña? No, de quienes deciden qué banderas pueden ondear en el ayuntamiento y cuales no, atendiendo a criterios como "las que nos representan" (Barcina dixit en 2007) o a lo que dice la denominada "Ley de Símbolos", perpetrada por UPN precisamente para perseguir a la ikurriña; ¡con lo fácil que sería optar, más que únicamente por las que les representan -a ellos, a los nacionalistas españoles-, por las que representan a la ciudadanía en general, teniendo en cuenta el amplísimo porcentaje de voto nacionalista vasco de Ramplona! Con lo fácil que sería optar por tratar de integrar a dicho sector de la población, en vez de por el integrismo excluyente de corte radical, auspiciado por UPN y demás cohorte de monaguillos. ¿Que cual es la solución para el conflicto del 6 de julio, habitual año a año, en la plaza consistorial? De cajón. Poner la ikurriña en el balcón. Como a las demás, el que quiera que la mire, y el que no, no.

LA NORMALIDAD ARTIFICIAL

A una con la llegada del botellón sanferminero, Pamplona/Ramplona, dime de qué presumes y te diré de qué careces (“nosotros los demócratas”, etc, etc) se hace experta en vender todo tipo de humos para tratar de atraer a incautos turistas al bureo, entre ellos, con la necesaria y seguidista connivencia de la prensa, la supuesta “normalidad política” en que vive la ciudad. Haciendo ver a quien así lo quiera que en la capital del viejo reyno no pasa nada que se salga de lo normal, en lo que a situación política respecta. Que, además, no hay motivos para la crispación, ni censura o prohibición alguna. Que los vascos son malos porque sí. Que, al igual que López y Basagoiti en su burbuja, vivimos en los mundos de Yupi. Que todo el mundo puede pensar –y obrar- en materia de pensamiento político como le plazca, nada más lejos de la realidad. De la dura realidad. Durísima como el botellazo recibido el año pasado en la plaza consistorial por un incauto madrileño… como consecuencia de tanta “normalidad”. De la normalidad envenenada que, al igual que a tantos, le vendieron. Y es que, al parecer, es algo normal, propio de situaciones de “normalidad” como la que aquí se padece perseguir enseñas legales como la ikurriña: con la saña con que dicho 6 de julio lo hizo la Policía Municipal. Una Policía Municipal que, por supuesto, al servicio de todos los ciudadanos (para nada una policía política al servicio de UPN), la persiguió dando prioridad incluso a las banderolas reivindicativas del Euskal presoak Euskal Herrira, telas en favor del acercamiento de las víctimas de la deslocalización carcelaria cuya persecución ni estamos sugiriendo ni alentando, dicho sea de paso. Que quede claro. Dando prioridad dicha Policía a la hora de entrar en la plaza como lo hicieron, a porras, sangre y fuego, a dicho hostigamiento a la bicrucífera, pasándose por los mismísimos atributos genitales razones más que evidentes relacionadas con la seguridad colectiva, para no entrar: argumento éste, la seguridad de todos, que curiosamente se está exhibiendo este año para llevar a cabo dos prohibiciones –a modo de cortina de humo que continúe distorsionando la realidad-, una nueva y otra, ya conocida: la prohibición de acceder con envases de vidrio (medida anunciada escasos días atrás; ahora, ¿qué harán los comerciantes con sus stocks de champán? Qué forma de putear al pequeño comercio, pagano siempre de todo tipo de incomprensibles decisiones) y, de forma más sutil, la siempre perseguida –de facto- presencia de ikurriñas. Como si ahí radicase el problema de lo sucedido el año pasado, en vez de en donde en verdad lo hizo… ante la mirada a otra parte de todos: en el excluyente proceder político de la Policía Municipal. En la violencia de persecución contra el símbolo por excelencia de EH demostrada por las huestes de don Simón. Y todo ello, no lo olvidemos, en el marco de una ciudad con un importante porcentaje ciudadano de simpatía y querencia hacia lo vasco. ¿El pagano de lo del cohete de 2010? El joven que quedó malherido como consecuencia directa del botellazo pero, en el fondo, de tanta “normalidad”. Ese joven cuya vida, tal y como se nos contó lastimeramente desde el Diario de no todos los navarros, quedó truncada para siempre. Bueno, como las de tantos y tantos jóvenes locales gratuitamente encarcelados como consecuencia ¿del “conflicto”? No, de la misma “normalidad”. De esa imperante e inoperante normalidad que, en una Comunidad como la Foral, con relevante presencia de euskaldunes –de obra, voto y sentimientos-, lleva a sus dirigentes a torpedear constontamente el euskera (aldeanos, más que aldeanos), la presencia pública de la ikurriña (todavía recordamos cuando, a finales de los años ochenta, el ABC camuflaba su presencia en la plaza consistorial coloreándolas de aparente rojo bandera de Navarra, en sus portadas en blanco y negro) y que, en el colmo de los despropósitos, ha llevado a la decadente Caja Navarra a tener que casarse mal, de penalty y expulsión directa –casi- con otra entidad con sus mismos males y pronóstico reservado, Caja Sol, en vez de a unirse con pretendientes más agraciadas, saneadas y cercanas como las cajas vascas: cosas de tanta anormalidad real convertida por obra y gracia de nuestros mandatarios en normalidad artificial. De unos mandatarios que, interesadamente, intere-sadomasoqistamente –nos atrevemos a decir-, siguen confundiendo ambos conceptos de “normalidad” igual que lo hacen con los de paz real y paz de los cementerios, para desgracia de todos. El año pasado, de J.C.A.R y su familia, en primer lugar.

PERSONAJES IMPRESCINDIBLES PARA EL CORRECTO DESARROLLO DE LA FIESTA (II): LOS BUSCAVIDAS

Presentes en todos los ámbitos de la vida en un país de pícaros como España, en un mogollón festivo como el que estos días inunda Ramplona no podían faltar ellos, claro está. Los Buscavidas de todo tipo y condición, término con el que no nos vamos a referir a los ciudadanos que, por imperativos del sistema, los mercados financieros o pura y dura mala suerte, realmente se la tienen que buscar, como los aspirantes a auxiliares municipales o naranjitos, las señoras y señoritas foráneas llegadas para comerciar con sus cuerpos, los barraqueros o feriantes, los vendedores ambulantes de poca monta -ya, de substancias, ya de cualquier tipo de cachivache- u otros perdedores, en general. Palabra esta, buscavidas, con la que nos vamos a dirigir a otro tipo de embaucadores y timadores igualmente presentes en la fiesta, pañuelico de San Fermín bordado al cuello y traje y guante blanco. A vendedores de humo y de vientos como los omnipresentes políticos –invitados por los mandatarios locales, los decadentes artistas españoles u otros como los promotores que, en 2010, desde su taifa de la Plaza de los Fueros, día a día promocionaron con sus negras camisetas lo de la candidatura de Ramplona a la capitalidad europea de la Cultural para 2016, sandez que, por cierto, no se creyó nadie. Ni ellos.
Y es que, ¿qué sería una fiesta como esta sin sus correspondientes buscavidas o moscones? Lo mismo que un día de campo sin moscas ni mosquitos o, en Toledo en la Edad Media, la procesión del Corpus sin la tarasca: nada. Así pues, ¿Qué sería del abolengo y postín de actos sociales como el vermouth post-procesional del 7 sin la presencia, en vez de los antiguos limpiabotas, de los actuales limpia-votos? ¿Qué, sin la asistencia a actos de idéntica raigambre de empresarios o directivos de cualquier cosa, Iglesia incluida, al frente de los cuadros o cuadras de mando de sus empresas? ¿Qué sería de los escenarios de la fiesta sin artistas terminales como los llamados a actuar este año en la plaza del Castillo? Buscavidas de otro siglo estos últimos que, frente a la profusión de músicos callejeros con alegría y algo que decir, dan la nota con su presencia -en vez de con sus canciones-, dando la histriónica sensación de que buena parte de los citados se reunieran única y exclusivamente para venir aquí, a poner el cazo en San Fermín. Que Dios nos pille confesaos y que San Fermín nos eche el capotico…

COLECTIVOS IMPRESCINDIBLES PARA EL DESARROLLO DE LA FIESTA (I): LOS CUERPOS POLICIALES


Nuestra consiga por San Fermín: que no trabaje la Guardia Civil

Ramplona, 6 de julio, bullicio y alegría, ya está la policía copando la ciudad; con placa y pañuelico, la porra y el soplete –con la excusa de lo de la alcoholemia este último, dirección Norte preferentemente-, y presta la primera a ser desenfundada al o a la menor ocasión. Por ejemplo, ante la camiseta o pegatina reivindicativa impunemente exhibida por cualquier menor embriagado hasta las trancas de juventud, utopías y alcohol, como mandan los cánones estos días. O, como el pasado día 6 en la plaza del Ayuntamiento, prestos a desenfundar el cutter, en nombre de la sacrosanta “seguridad”. Curioso, no dejar introducir envases de vidrio y sí Policías con cutters, para velar por la integridad de la fiesta. Así pues, concluyamos; ¿qué sería de nuestras fiestas sin la presencia policial? ¿Qué habría sido treinta y tres años atrás, sin dicha multi-presencia, de un día como hoy? ¿Qué haríamos sin la nunca suficientemente agradecida presencia de los “maderos” del encierro (y no estamos hablando del vallado), la procesión, la salida de las peñas (incluso disfrazados de rastafaris los mismos, bailando el agua a presuntas amenazadas por la ETA) o el lanzamiento del txupinazo?
Así pues, 8 de julio que es, ya han pasado dos días desde que nuestros omnipresentes protectores de la ley, nuestros policromáticos polis y derivados –diferentes entre sí cual los mozos de las peñas, unos con un blusón, otros con otro; de azul, verde o rojo como van los polizontes, aunque, igualmente, honrando a un mismo patrón-, tras preparar a conciencia sus multicolores uniformes sanfermineros (de Policía Nacional, Municipal, Foral, Guardia Civil o de secretas o casuals –mismamente, tal y como se denomina a los skin heads camuflados-) comenzaran a apatrullar la ciudad; esforzados cuerpos policiales… y derivados, como los escoltas –de ciudadanos- y su subespecie más conocida, los denominados “pastores” del encierro o toreros de personas: ¡si casi es mejor que te empitone un toro que que te alcance un varazo de un pastor! Escoltas estos últimos de los morlacos y gremio cercano al de los “porteros” de discoteca, a la vista de su comportamiento en sociedad. En cualquier caso, ya están aquí los maderos, prestos a protegernos y a velar por nuestra seguridad: deteniéndose en lo que se fuma o se pretende esnifar y deteniendo al molestado si procede o interesándose vía talonario de propinar multas de por medio por la “seguridad” de nuestro coche, según dé señales de proceder de Madrid o de Donostia, que aquí todo puntúa. Eso sí, en el mare magnum de la plaza de Nabarreria, guiri viene, guiri va camino del asfalto, a ninguno verás. Ni en la entrada de Jarauta, confiscando a presuntos cocineros su cargamento ilegal.
En fin, Serafín. Ah, ¿que no me has visto? Toda vez que estamos de fiesta y que en este blog no le deseamos mal a nadie, ni siquiera nada malo, en aras de que trabajar es algo malo, he aquí nuestro deseo sanferminero para todos ellos: que en Ramplona, por San Fermín, no trabaje la Guardia Civil. Y pa´lo que hacen… Ni la Policía Nacional, Municipal o Foral: he aquí, si fuese niño, qué pediría al santo morenito en la Ofrenda. De verdad.



MUNICIPALES "BUENOS" ESCOLTANDO LA IKURRIÑA MINUTOS ANTES DEL LANZAMIENTO DEL TXUPINAZO; AL PARECER, MUNICIPALES "MALOS" PRETENDÍAN RAJARLA CON UN CUTTER

PERSONAJES IMPRESCINDIBLES PARA EL CORRECTO DESARROLLO DE LA FIESTA (Y III): LOS CAMELLOS


Por San Fermín en Ramplona se “pasa” muy bien…
(popular)

Fieles a su cita un año más, ya hace días que llegaron a la ciudad los distintos gremios imprescindibles para el correcto desarrollo de la fiesta: y no estamos hablando de mayorales, barraqueros, aspirantes a naranjitos –llegados de provincias foráneas- ni de buscavidas sanfermineros de todo tipo y pelajes, personajes a quienes ya dedicamos una especial entrada. Y no para los toros, precisamente: más bien, en esta, vamos a hablar de unos peculiares vendedores callejeros. De una necesaria subespecie dentro de la de los vendedores ambulantes. De unos vendedores que, sin puestos, venden así –en ocasiones- y eso precisamente, puestones. Colocones. Asínas, hablemos de esos repartidores al por menor (dinero mediante) de sueños e ilusiones conocidos como los camellos, tan queridos por jóvenes y mayores. Tan reconocidos y fáciles de reconocer. Y es que, cosas de la gran demanda existente por estas fechas, viniendo a Ramplona como vienen, no sólo por Navidad, a una cita como el presente botellón, ¿cómo iban a faltar?
Como clarividentemente dice el himno de una de las peñas, Por San Fermín, en Pamplona se “pasa” muy bien, pero ¿qué? ¿Lo qué? ¿Txakolí? Venga, hombre, seamos serios. Si más allá que una palabra semidesconocida, (si no del todo, porque sale en algunos himnos de las peñas), ¡nadie sabe qué es eso! Venga, ¿qué es eso que, según la coplilla, se “pasa” tan bien? Pues todo tipo de ambrosías ilegales. Todo tipo de substancias psicotrípicas, verdaderamente populares en cualquier espacio festivo que se precie por encima de dimes, diretes e ideologías. Por cierto, hablando de las peñas, ¿por qué cuando regrabaron y, en algunos casos, rescribieron sus himnos en 2007… no cambiaron eso de “txakolí” por ejemplo, por “speed”? ¿Por qué no aprovecharon para actualizar dichos cánticos verdaderamente, lejos de hipocresías y moralinas? ¡Con lo bien –y acertado- que hubiera quedado cantar “entre rayas de speed” en vez del obsoleto “entre copas de buen txakolí”?
Pero este año, sniff (onomatopeya con connotaciones de lamento, no de “esnifada”: también es casualidad), cosas de la actual coyuntura económica, los verdaderos Reyes Magos de estas fiestas, los ahora mismo homenajeados camellos, tal vez no logren colocar sus diferentes mercancías en los mercados; ¿cosa de la crisis? ¿De la deuda -o deudas-? Claro. Y si no, que se lo pregunten a buena parte de aquellos mozos viejos que, expulsados vía ERE´s de sus trabajos en los primeros meses de 2009, a estas alturas de la jugada, tras endiñarse las indemnizaciones correspondientes metiéndoselas por la nariz y expulsándolas por la polla en el puticlub de turno, ahí están. Extintos además sus subsidios de desempleo, sin saber hacer nada en la vida, a verlas venir. Esperando a ver cómo les vienen dadas en lugar de, como en años anteriores, a verlos venir a ellos, dinerito fresco en mano. A ver venir a los druidas de la fiesta, portadores por excelencia de la magia llamada a protagonizar estos días tantos “encierros” en los baños: los camellos.

UNA DE RECETAS GASTRONÓMICAS: SALPICÓN DE VINO


Receta para cuantas personas se quiera convidar, al grito de “ahora, ahora, ahora viene el mol”; tal vez al principio sus invitados no entiendan la razón de dicha expresión, pero finalmente, lo harán. Nivel medio de dificultad para prepararla, cero. Es más, cuanto más inconsciente se esté a la hora de proceder, mejores serán los resultados.
Ingredientes: un pamplonica cocido previamente rodeado de gente en un bar, un katxi de vino en sus manos y un disco de La Polla Records pinchado de sopetón por el DJ. El resultado será inmediato.
La presente delicia gastronómica admite diferentes variantes, tanto en lo referido a su contenido (salpicón de cerveza, sangría, kalimotxo, mojito o cubalitro), como al lugar elegido para degustarlo. De preparación e inmediata disposición para ser servido tengan o no tengan los comensales ganas de comer. Nada que ver con el denominado “salpicón de marisco”, más propio de las mesas de los ricos.

SANFERMINES, DÍAS DE ESTOCADAS SIN IGUAL

¡Manos arriba, esto es una ronda!

Las fiestas de Ramplona, iniciadas ayer, si en algo son prolijas, lo son en estocadas. En certeras estocadas propinadas dentro y fuera de la plaza… del Castillo, he aquí qué hemos querido decir: dejemos a toros y toreros lejos de esto, que bastante tienen con lo suyo. ¿Que por qué ni hablamos ni nos posicionamos ni nos vamos a posicionar en este espacio sobre ellos? Porque ya lo hacen los demás, y lo que a nosotros nos va, además de la marcha, es intentar ser originales. Y, porque tal y como entiende nuestra actual presidenta, somos buenos navarros. Bueno, y dicho esto, volvamos sobre nuestros pasos: los Sanfermines son pasto de sableos, clavadas y puyazos de todo tipo, a toda hora y en todo lugar, propinadas las mismas por malencarados apandadores de diferentes raleas; por determinados camareros (con vocación de taxistas), tenderos (al mando de locales reconvertidos arteramente en bares) o barraqueros tan llorones en la prensa como faltos de escrúpulos a la hora de cobrar, piratas todos ellos de tierra firme y agua dulce que, como buenos españoles, entregados a la picaresca en cuerpo y alma, no dudan en saquear a sus clientes, barras, mostradores o taquillas en vez de burladeros de por medio. En el caso de los primeros, en hacerlo a punta de abridor: ¡pero si accedes a según qué bares y, tras solicitar una ronda, tienes que llamar al director de una entidad financiera para consultarle si te la pueden financiar! Y con avalista de por medio, claro está. Y todo ello por haberte atrevido a pedir unos marianitos –al mediodía- o, los más valientes (eso es osadía, no correr en el encierro), unos cubatitas por la noche, con los vasos sospechosamente llenos de hielos en vez del brebaje de que se trate. Vamos, como los muros de las construcciones de mala calidad, hechos con arena, en vez que de con cemento. Y es que ir de bares estos días se convierte en sinónimo de irse de varetas, a la hora de pagar. De cagarse continuamente en todo, a la hora de hacerlo. Como ir a las barracas, artefactos giratorios cuya falta de público, en funcionamiento prácticamente vacíos cuantos días hemos paseado por allí (por el parque de la RUiNA, la RUNA en tiempos pasados), nos recordó ineludiblemente a los bares. Semivacíos pese a sus camareros prestos a salir al quite –o vaciado de bolsillos en un pispás- y a la machacona música ambiente. En fin, que a la hora de pedir la dolorosa, te vas por las patas… O por patas directamente de allí, sin abonar nada una vez consumida la paciencia. Emulando a los bravos corredores mañaneros, sin pagar. En ocasiones, ganas dan.

MERIENDA PARA HOY PARA LOS TOROS: RELLENO DE VINO


Ingredientes o, mejor dicho, único requisito imprescindible para que 1 persona llegue de esa guisa a merendar: disponerse a hacerlo tras haber estado toda la mañana y parte de la tarde ingiriendo vino. Bebiendo vino en cantidades industriales. Vamos, como si en vez de al vermouth o a comer hubiésemos asistido a las bodas de Caná. Una vez llegados así, rellenos de vino, a la merienda, lo que allí se consuma (es conveniente ingerir alimento sólido alguno para no salpicar, en caso de verse abocado a vomitar; así, de este modo, no mancharemos todavía más los bajos de los pantalones), lo que allí se coma, más allá de lo dicho, será lo de menos. Que aproveche!