SABEMOS POR QUÉ SE ROMPIÓ EL TÁNDEM UPN-PP

Pues sí, así es. Hemos dado en la diana. Tras la semana del trascendental partido de vuelta disputado a comienzos de 2009 entre Osasuna y el anexionista Athletic de Bilbao, estamos en condiciones de afirmar que sabemos por qué Miguel I de Navarra rompió recientemente la alianza que le unía con Rajoy el Pusilánime, muy sencillo el asunto: nada de fontanería política de altos vuelos, sesudas maniobras con maquiavélicos fines electorales, calculadas estrategias electoralistas ni de enrevesados movimientos electoralistos. Nada de eso. Nada de nada, más bien. Y es que, además, podemos reconocer sin ambages que ha sido fácil resolver el enigma; que no hemos tenido que devanarnos los sesos para obtener la respuesta de la siguiente pregunta, a buen seguro, para los analistos y demás estudiosos de la política foral, la del millón: ¿por qué meses atrás saltó por los aires el tándem UPN-PP? Y es que, ¡ojalá todos los problemas, todos los dilemas que nos acechan a diario tuviesen tan fácil solución! ¡Qué fácil sería la respuesta! Tan sencilla como ésta: ¿recordáis el posado que, en una de sus últimas visitas a Bilbao, hizo Marianico el Breve con la camiseta de cierto club de fútbol? ¿Con cuál, con la de qué equipo, rojiblanca por más señas? ¡Con la del Athletic, conjunto con el que, tras acusarle de cosas relacionadas con asuntos de intromisión en su cantera y plantilla, rompió relaciones tiempo atrás Osasuna, club señero de Navarra y, claro está, primero en el corazón del bravo corellano que nos guía desde la presidencia del Gobierno Floral! Así pues, ¿Por qué se rompió dicho tándem UPN-PP, granítico, firme e inquebrantable como la presa de Itoiz que parecía? Por eso mismo, blanco y en botella… del Madrid, ¿no? Por la exhibición de la camiseta del conjunto vasco por parte de Rajoy, hecha tal vez con su mejor intención, desde su convencimiento de que el club de Ibaigane es el único que compite sólo con españoles en sus filas. Pero no, craso error, dicha exhibición. Y es que, a decir verdad, Marianico el Breve (que no el corto) no pudo elegir peor de cara a sus socios navarros a la hora de escoger la camiseta de un club para posar, optando por la del que mejor representa el carácter claramente anexionista de los vascos, siendo como es en materia futbolística el proceder de los siempre al acecho bilbaínos (entrar hasta la cocina en el club rojillo) toda una metáfora de las verdaderas intenciones políticas de Ajuria Enea, engullir Navarrra directamente; no, no pudo hacerlo peor Rajoy, escogiendo la de quienes ahora mismo son el peligro más preclaro para la independencia y autonomía de Navarra: de ésta una, grande y libre tierra que, desde que en 1512, en libertad, de igual a igual y con la nobleza y tolerancia que le caracteriza, se incorporara pacífica y espontáneamente al Reino de España, tan cómoda se ha encontrado en él, para mayor gloria de sus dirigentes. Así pues, ¿entendéis ahora dicho porqué? ¡Con razón que se ha enfadado el bravo corellano, viéndose obligado a cancelar su relación con el PP!